Si bien la reforma energética comenzó con una gran euforia e interés en la parte de hidrocarburos con las rondas petroleras, ahora el foco de atención se ha dirigido al mercado de gasolinas y a las energías renovables.

En la antesala del Tercer Symposium Realidad Energética: nuevos horizontes, a realizarse en Tampico, Tamaulipas, los próximos 24 y 25 de agosto, organizado por Grupo MILENIO, actores del sector abrieron el debate sobre esos temas.

Sobre gasolinas, el presidente de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), José Ángel García Elizondo, expuso que la apertura en el mercado de combustibles es gradual, pero a su vez acelerada, pues hay países como Noruega o España, a los que les tomó una década. Para el sector gasolinero, un tema relevante es la carga impositiva a los combustibles, pues México no tendrá gasolinas más baratas si no se disminuye, aun cuando se liberen los precios.

De hecho, de seguir teniendo precios de gasolinas y diésel donde 50 por ciento por litro son impuestos, aunque se importen más baratos, el precio puede elevarse a 15 o 15.50 pesos por litro; “liberar el precio no quiere decir que bajará”.

México ocupa el lugar 58 de combustibles caros dentro de 198 países, aunque si bien no es de los más altos no hay justificación para no poder ocupar un lugar como el de Estados Unidos, que se encuentra en el número 27, donde el impuesto oscila entre 18 y 20 por ciento por litro. Asimismo, precisó que los precios también van a depender de factores externos, como las cotizaciones internacionales del petróleo y el tipo de cambio.

A pesar de que ya se tiene más de una centena de permisos autorizados por la Secretaría de Energía para la importación de gasolinas, diésel y turbosina, no ha entrado ni un solo litro al país, precisamente por el alto impuesto y la falta de infraestructura.

La necesidad de importar esos combustibles existe, puesto que hay regiones que sufren de escasez; sin embargo, un escenario es que estas operaciones no se realizan hasta que se libere el precio; es decir, hasta 2018 o en su caso antes si lo decide el gobierno.