Xóchitl Gálvez, aspirante a la presidencia de la República por el Frente Amplio por México, indicó que abriría Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a la inversión privada en caso de ser electa para el cargo de 2024 a 2030.   

Señaló que ambas compañías son malas para la administración del dinero y que, para ser productivas deben tener la intervención de la iniciativa privada, pues cuando no hay fondos es necesaria la intervención de este sector.   

Asimismo, destacó que el modelo de Petrobras en Brasil podría ser una alternativa para nuestro país, además de que cambiaría el nombre de Pemex a Energías Mexicanas (Emex).   

En tanto, refirió que ‘hay que ser muy estúpidos’ para seguir apostando a los combustibles fósiles, por lo que su estrategia de política energética se basaría en la explotación de fuentes renovables donde México tiene un amplio potencial por sus condiciones geográficas, en tanto consideró necesario que se desarrolló infraestructura en el sureste del país para el transporte de gas natural y petróleo en la industria petroquímica.   

Gálvez comentó que regresaría las rondas petroleras puesto que Pemex no cuenta con los recursos ni la tecnología para explotar los hidrocarburos como algunas empresas trasnacionales, ya que los procesos de exploración cuestionados por las autoridades de la Cuarta Transformación requieren tiempo para ser exitosos.