
Pemex y Mota-Engil construirán planta de fertilizantes
La nueva unidad se ubicará en Veracruz y se contempla una
producción anual equivalente a más de 700,000 toneladas de amoniaco, urea y
AdBlue.
La constructora Mota-Engil firmó un acuerdo con Petróleos
Mexicanos (Pemex) por un valor cercano a 1,200 millones de dólares, para
construir una planta de fertilizantes en el estado Veracruz, informó este
martes el conglomerado industrial.
Esta empresa inició operaciones en México en el 2008 y desde
entonces ha participado en múltiples proyectos de infraestructura; durante la
actual administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha colaborado
en el desarrollo del Tren Maya.
“El acuerdo prevé el desarrollo de la ingeniería,
construcción, financiación y operación de una planta de producción de amoniaco,
urea y AdBlue con una producción anual equivalente a más de 700,000
toneladas, señaló Mota-Engil en un comunicado.
Este volumen equivale 131% de la elaboración de amoniaco que
Pemex prevé alcanzar en sus complejos petroquímicos durante este 2024, que es
de 533,000 toneladas, según previó en mayo pasado su director Octavio Romero
Oropeza, durante una intervención en la conferencia matutina del presidente
Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, el quinto mes del año fue atípico para la
estatal, que previamente a lo largo del año lleva una producción promedio de 25
millones de toneladas. La elaboración de amoníaco, usado como fertilizante para
actividades agrícolas principalmente, se ha mantenido en los mismos niveles
durante toda la presente administración, aunque previamente existen reportes en
los que no se incluye este petroquímico, mientras que la producción de urea y
su purificación mediante AdBlue no son reportadas por la subsidiaria Pemex TI.
El convenio, suscrito por la unidad de la compañía en México
y la filial de la petrolera Pemex Transformación Industrial (PTI), establece
que el cliente entrega las principales materias primas (gas y agua) al
operador, quien será el único responsable de su transformación y de la entrega
del producto final.
La construcción de esta planta permitirá disminuir las
importaciones de fertilizantes y fortalecerá significativamente la autonomía
productiva del sector agrícola del país, además de promover soluciones
ambientales sostenibles, detalló Mota-Engil. El proyecto tendrá tres fases: la primera, el desarrollo
estudios de viabilidad, durará de cuatro a seis meses; la segunda, la
construcción, tardará 42 meses y representará la inversión de 1,200 millones de
dólares, y la tercera, la operación técnica, se prolongará por 20 años.
Cabe recordar que con un volumen de 20.009 millones de
toneladas en 2022, que implicó una reducción anual de 2%, la producción química
y petroquímica nacional se ha estancado en los últimos años, mientras el
consumo nacional aparente no ha vuelto a sus niveles pre pandemia, con
importaciones que significan el 59% de las necesidades nacionales.
El consumo aparente de la industria llegó a 38.233 millones
de toneladas, esto implicó una caída de 3%, pero sigue siendo 6.9% inferior al
del 2019 y más bajo que los 41.028 millones de toneladas del 2020.