El combate al huachicol es hoy uno de los frentes prioritarios del Gobierno federal. 

El huachicol es el término coloquial que se utiliza en México para referirse al robo, venta y distribución ilegal de combustibles, principalmente gasolina, diesel y gas LP.   

Este delito incluye desde el saqueo directo de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) hasta el almacenamiento, transporte y comercialización clandestina del combustible robado. 

Este concepto también aplica para los productos obtenidos o alterados de manera fraudulenta, como gasolina adulterada o mezclada con otras sustancias para aumentar el volumen y reducir costos, en el caso del gas LP, se le conoce como huachigas. 

La palabra Huachicol originalmente hacía referencia a una bebida adulterada en el centro del país y el término proviene de huachicolero, que era el nombre dado a las personas que rebajaban el alcohol con agua o sustancias químicas, con el tiempo y por las similitudes del procedimiento, esta palabra fue adoptada para nombrar a quienes rebajan o roban combustible.   

Actualmente se sabe que el huachicol genera pérdidas multimillonarias al Estado mexicano cada año, además genera otras situaciones no favorables o fuera del marco de la legalidad como poner en riesgo vidas humanas debido a explosiones o fugas, financiar al crimen organizado, afectar la economía formal y distorsionar los precios del mercado y en general debilitar la seguridad energética del país.  

Por su gravedad, el huachicol es considerado un delito federal en México y desde 2018, el Gobierno ha intensificado su combate mediante operativos, reformas legales y nuevas estrategias de vigilancia y sanción. 

EL COMBATE AL HUACHICOL 

El combate al huachicol es hoy uno de los frentes prioritarios del Gobierno federal, y ante la evolución de las modalidades, incluyendo también el robo y venta clandestina de gas LP (huachigas), ha llevado a reforzar estrategias de inteligencia, vigilancia y sanción. 

Entre los decomisos más recientes, destacan el aseguramiento de más de 500 mil litros de combustible ilegal en Tamaulipas y Veracruz, así como la clausura de centros de distribución clandestinos en el Estado de México y Guanajuato. 

Estos operativos, encabezados por la Guardia Nacional, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Fiscalia General de la República (FGR), evidencian la capacidad logística y territorial que aún conservan estas redes criminales.   

Ante esta realidad, el Gobierno federal ha adoptado una nueva línea de acción más agresiva, Pemex, en coordinación con la Secretaría de Energía (Sener) y la recién creada Comisión Nacional de Energía (CNE), ha comenzado a suspender de manera inmediata los permisos de operación de gasolineras y estaciones de gas sospechosas de comercializar combustible ilegal, sin previo aviso ni derecho a defensa. 

Esta facultad se respalda en el artículo 79 de la nueva Ley de Hidrocarburos, vigente desde el 18 de marzo.  

¿QUÉ PASA CUANDO UNA GASOLINERA VENDE HUACHICOL?  

A diferencia de la reforma de 2021, que permitía suspensiones tras realizarse una audiencia legal, la nueva legislación permite acciones cautelares inmediatas. 

La suspensión surte efectos de manera inmediata y hasta en tanto no se desvirtúen las causas que dieron origen a la medida, señala el artículo 79. 

En otras palabras, si una gasolinera está vinculada con prácticas ilegales, puede ser cerrada en el acto, y sólo reabrirá si logra demostrar su inocencia. 

Entre las razones por las cuales una empresa puede ser sancionada destacan:  
- Incumplimientos con el SAT o irregularidades fiscales.  
- Problemas en sus controles volumétricos.  
- Uso de facturación simulada o domicilio fiscal inexistente.  
- Riesgos identificados a la seguridad nacional, energética o económica del país.   

¿GASOLINERAS SE PROTEGEN CON AMPAROS? 

Otro cambio significativo es que los amparos judiciales ya no impedirán la ejecución de estas clausuras, aunque una empresa lleve su caso a tribunales, la suspensión permanecerá vigente. 

Las autoridades tienen hasta 15 días para formalizar el procedimiento sancionador, mientras los establecimientos afectados permanecen cerrados. 

Con esta reforma, el Gobierno federal busca cerrar cualquier resquicio legal que permita operar a empresas ligadas al mercado negro de combustibles, las autoridades ya han declarado que la intención es depurar el sector energético de operadores irregulares, fortalecer la trazabilidad del producto que circula en el país y proteger tanto la economía como la seguridad nacional. 

Estas acciones han sido celebradas por Pemex, que durante años ha sido la principal víctima del huachicol, y ahora apuesta por mayor control operativo y transparencia en el sistema de distribución de combustibles, como parte de su estrategia de reestructuración institucional y combate frontal a la corrupción en la cadena de valor energético.   

¿COMO OPERA EL HUACHICOL? 

El huachicol es una actividad ilícita que involucra:

- Tomas clandestinas en ductos de Pemex. 
- Transporte ilegal en pipas o vehículos adaptados. 
- Venta informal en puntos no autorizados o incluso en gasolineras coludidas. 
- Redes de corrupción que incluyen a empleados públicos, autoridades locales y grupos del crimen organizado.  
- El huachicol genera pérdidas multimillonarias al Estado mexicano cada año.