
El petróleo se asoma a los 90 dólares entre los huracanes del Caribe y el conflicto en Gaza
El arribo del huracán Béryl al Golfo de México tensiona el
mercado de crudo y el Brent marca máximo de dos meses en 87,13 dólares por
barril.
La llegada de la temporada de huracanes a las costas de
Estados Unidos mantiene encendidas las alarmas del mercado global petrolero. El
precio del barril de Brent, el tipo de crudo de referencia en Europa, cotiza
este martes en 87,13 dólares por barril, su importe más alto en dos meses tras
escalar casi un 3% desde el cierre del viernes. El prematuro inicio de la
temporada de tormentas en el Atlántico amenaza las zonas productoras en el
Golfo de México, donde Norteamérica extrae cerca del 15% de todo su crudo. La
posible escalada del conflicto entre Israel y Gaza también preocupa a los
analistas, que resaltan que el último ataque con un escuadrón de drones a un
cuartel Israelí podría disparar de nuevo la tensión en la zona.
La noticia se ha hecho sentir mercados internacionales del
crudo. El petróleo Brent superó los 87 dólares por barril, un máximo al que no
llegaba desde finales de abril de este año. Aunque aún lejos del pico de los 91
euros al que llegó a inicios del mismo mes, cuando la OPEP+ —el cartel de
países productores liderado por Rusia, Arabia Saudí y Emiratos Árabes—, cerró
aún más el grifo de la producción, lo que apuntaló los precios. Por su parte,
el precio del West Texas, de referencia en Estados Unidos, se elevó este martes
un 2% hasta los 84,05 dólares por barril, después de registrar una subida
durante junio del 6%. Las alzas anteceden las vacaciones de verano, cuya
demanda suele empujar en esta parte del año el precio de los combustibles,
según los expertos de IG. Las proyecciones de la Asociación Estadounidense del
Automóvil (AAA) pronostican que este año los viajes por automóvil crezcan un
4,8% con respecto al 2023.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) estadounidense elevó
esta mañana la categoría de la tormenta Béryl al nivel cinco, el más alto en la
escala Saffir-Simpson, que se usa para medir la potencia de este tipo de
eventos, lo que le convierte en el huracán más fuerte jamás formado en el
Atlántico en esta época del año. El Béryl ya habría tocado tierra en la isla de
Carriacou en el Caribe y se dirige hacia Jamaica, antes de llegar al Golfo de
México, “una región clave para la producción de petróleo, y cualquier
interrupción podría tener un impacto significativo en la oferta”, según los
analistas de IG, una plataforma de compraventa de acciones. El huracán podría
alcanzar una intensidad con vientos de hasta 260 km/h”, indica el NHC. Para
enmarcar el potencial destructivo, el huracán Katrina de 2005 alcanzó en sus
picos vientos de 280 km/h. El evento obligó a paralizar el 22% de la producción
petrolera en el Golfo de México. Entonces, el precio del crudo se elevó seis
dólares en apenas dos semanas.
A esto se suma la presión de una escalada del conflicto
entre Israel y Gaza. Este fin de semana, grupos militares de la Resistencia
Islámica (Hezbolá) lanzaron contra escuadrón de drones ca un cuartel Israelí,
hiriendo a 18 solados. “Los próximos días serán cruciales para determinar si
estos factores seguirán impulsando los precios del crudo o si se observará una
corrección en el mercado”, estiman desde IG. La prolongación de los ataques de
milicias hutíes en el canal de Suez, por donde se estima que transita el 10%
del comercio marítimo mundial de petróleo, también sigue tensionando el mercado
de crudo. Un número considerable de petroleros han decidido emprender la ruta
por el Cabo de Buena Esperanza, una ruta más segura que bordea el extremo sur
de África, aunque más larga y costosa al mismo tiempo.
Desde Bank of América se muestran más cautos sobre las
potenciales subidas. Argumentan que los inventarios mundiales de crudo se han
ido abasteciendo a un ritmo fuera de lo común para la temporada, por lo que
descartan picos producidos por la demanda. Cita como ejemplo a China, algunos
países de la región del Asia Pacífico y Europa. “No nos sorprende que los
precios y la estructura del petróleo se han suavizado en los últimos meses en
respuesta a la laxitud de los fundamentos”, zanjan desde el banco norteamericano.