Ángel Carrizales López, director de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), señaló que durante los próximos meses pondrán especial atención en la regularización y el cumplimiento regulatorio de las estaciones de servicio del país. 

Detalló que durante los dos años y medio que lleva al frente de la ASEA, se ha dado cuenta que existe una problemática muy recurrente entre estaciones de servicio que no han podido emigrar de los permisos estatales a los federales. 

“Puedo decirles a los inspectores de la agencia que vayan y multen a todos, y por la falta de un papel se clausure, pero creo que si bien, como autoridad tenemos (mucho) que hacer, creo que vamos más allá, me gustaría que las multas fueran por daño al medio ambiente, a las personas, comunidades, instalaciones”, dijo en un evento reciente. 

Por lo tanto, afirmó que lo que están buscando como dependencia es sentarse con los dueños de las estaciones de servicio, más allá de las asociaciones, para conocer de viva voz porque no han emigrado de este permiso estatal al federal. 

“Tenemos que valorar qué estaciones de servicio van a entrar a este programa, las que no podrían entrar son aquellas que construyeron sin ningún estatal ni federal, eso tampoco vamos a permitir que nos vean la cara, como autoridad”, advirtió. 

El principal problema de las autorizaciones estatales en materia de impacto ambiental, explicó Carrizales, consiste en que no son vigentes, o bien, existe incertidumbre sobre su vigencia, por lo que el objetivo de la ASEA es garantizar que las actividades del sector hidrocarburos se desarrolle con criterios de protección al ambiente, bienestar social y desarrollo económico. 

El pasado 11 de marzo, diversas dependencias, entre ellas ASEA, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Comisión Reguladora de Energía (CRE), clausuraron dos estaciones de servicio de la empresa Shell porque carecían de resolutivo en materia de impacto ambiental vigente para realizar actividades en el sector hidrocarburos.