El 57 por ciento de los empresarios gasolineros consideran que en marzo el robo de combustible se incrementó, de acuerdo con un análisis de la firma PetroIntelligence. 

El resultado representa un aumento en la percepción de los empresarios gasolineros, desde el nivel de 49 por ciento que se registró en el mes anterior, señala el documento “Percepción y perspectivas de los gasolineros en México”. 

Por otro lado, el 82.5 por ciento de los encuestados indicó que la adulteración, contrabando fiscal y huachicol en su zona de operación es mayor. En comparación con el mes pasado en donde dicho porcentaje era de 62 por ciento. 

Al inicio de este gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el combate al robo de combustible sería uno de los pilares de su administración; el mandatario ha señalado que el desvío de hidrocarburos se redujo en 90 por ciento tras el inicio de este sexenio. 

No obstante, las cifras de Pemex señalan que el problema sigue en ascenso, pues el huachicol suma 54.9 mil millones de pesos desde el año 2019 hasta 2023. 

El hurto de combustible a los ductos de Pemex creció 339 por ciento, al pasar de 4.6 mil millones de pesos en 2019 a 20.2 mil millones de pesos en 2023; en el sexenio suman 24.2 mil barriles robados cada día en promedio. 

Por otro lado, el análisis de PetroIntelligence señala que las expectativas respecto a las ventas, en general, siguen siendo positivas, pues se espera que las ventas sean mayores a años pasados; sin embargo, el 77 por ciento de los gasolineros indicó que las ventas de marzo del 2024 fueron menores a las ventas de marzo del 2023. 

Los encuestados indican que en Durango hay presencia de precios no acordes con los costos; mientras que, en Hermosillo, Sonora, se observan variaciones de precios inusuales; en Puebla hay presencia de precios al público muy por debajo del precio de mayoreo de Pemex con descuento nivel 9; además de que, en Piedras Negras, se detecta la presencia de importación irregular vía transporte por ruedas. 

 En la Zona Metropolitana de Monterrey se observa un aumento de precios ante supuesta disminución de contrabando, y finalmente en el Valle de México, presencia de mezclas con etanol fuera de la especificación normativa.